Mari Alcalá/Cosoleacaque, Ver
“Adiós osito, perdóname”, escribió Yara Alejandra Tapia Cadenas, en sus cartas póstumas, tomó un cable de luz, la sujetó a una viga de su casa, luego la colocó a su cuello y se aventó al vacío.
Yara de 18 años sufría de depresión y se refugió en las drogas, esto, debido a que meses atrás estuvo embarazada y había perdido a su bebé.
Intentó otras veces quitarse la vida pero no le había resultado, su pareja intentó apoyarla incluso por eso eran las discusiones.
Sin embargo, Yara ya sufría de un cuadro depresión alto tras haber sufrido un aborto espontáneo, evento que le provocó dolor, ansiedad, y estrés postraumático.
Yara escapó varias veces de su casa
Yara estaba vulnerable y no recibió apoyo profesional, se sabe que la joven creció en un ambiente familiar con problemas y varias veces huyó de su casa en Acayucan.
Desaparición que quedó registrada el 15 de agosto del 2021, Yara en aquel entonces tenía 16 años y era buscada por la fiscalía ya que sus padres la habían reportada como desaparecida.
De las veces que fue reportada como desaparecida, a las pocas horas Yara aparecía, y decía que salía de su casa por su propio pie, huyendo de los problemas en la familia.
El año pasado empezó a vivir con su novio, cuando supo que estaba embarazada pensó en una vida diferente y que esta vez imagino que si lograría la felicidad anhelada, pero el producto no se logró.
Yara no pudo soportar perder al bebé, pues con él ya había planeado una vida al lado de su pareja, y a quien te brindaría el amor en familia que a ella le faltó.
Escribió varias cartas
La pérdida del bebé la hundió en la depresión, y el pasado 04 de mayo espero que su pareja fuera a trabajar, y aprovecho para quitarse la vida, no sin antes escribir varias cartas póstumas para su madre y su novio.
En las cartas póstumas Yara les pide perdón a su novio y madre, y explica que decidió terminar con el dolor que le aquejaba, dejando ahora un dolor a sus seres queridos.
En los escritos Yara dice que ya está con su angelito (su bebé), que no se culpen por esta decisión.
Psicólogos expertos en el tema dice que tras el aborto se puede producir depresión, ansiedad, tendencia al uso de drogas, conducta suicida y predisposición a autolesionarse, pero en otros no se detectan trastornos mentales secundarios al mismo, tratar de evidenciar la posible existencia o no de un síndrome post-aborto.
A diferencia del embarazo, que debilita los impulsos suicidas, hay pruebas significativas de que el aborto aumenta dramáticamente el riesgo de suicidio.