Osvaldo Antonio Sotelo
Coatzacoalcos, Ver. –
Derechohabientes del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) denunciaron públicamente la mala atención a los pacientes en la clínica número 36 de Coatzacoalcos, en donde sigue haciendo falta personal médico, medicamentos y equipo.
Eugenio Fuentes Hernández, vecino del municipio de Agua Dulce narró el calvario que ha vivido en los últimos nueve meses con su hija Alma Lidia Fuentes Damaso, quien ingresó en junio del año pasado a este hospital por el nacimiento de su hijo, pero señala que no recibió atención médica a tiempo.
Lo que le han dicho los doctores, es que a su hija le dio un parocardiaco durante el parto, por lo que el cerebro se quedó sin oxígeno y sin sangre, quedando en estado vegetal.
La paciente permaneció en terapia intensiva, sin embargo, tampoco a recibido atención de especialistas para que mejore su salud.
El presunto caso de negligencia médica fue denunciado ante la Fiscalía General del Estado (FGE), sin que existan ningún tipo de avances en las investigaciones.
Otro caso es con el paciente Moisés Jiménez Heredia, vecino de villa Allende, quien lleva más de tres semanas internado.
Nora Palma Domínguez, dijo que su suegro ingresó a la clínica para que le retiraran la vesícula, y le fisuraron sus intestinos durante la operación.
“A tenido tres operaciones hasta el día de hoy, mi suegro no vino como esta ahorita, no nada más somos nosotros, hay muchísimos casos ahí que no atienden”, aseguró.
Mientras que Jorge Enríquez Robles Calvo, vecino de Coatzacoalcos, reprochó la mala atención a su madre María Candelaria Calvo Gómez, quien tiene más de una semana internada en el hospital.
La paciente, quien tiene problemas renales y de diabetes, necesitaba que le aplicaran plasma, lo cual se lo han negado a sus familiares.
“Ahorita nos hicieron conseguir un polvo que se llama lactosa, que no lo tienen aquí”, afirmó.
Finalmente, la ciudadana Lucrecia Hernández Aguilar, vecina del municipio de Cosoleacaque, reclamó que no hay doctores desde hace cuatro días para que atiendan a su esposo Abelardo Espinoza Zamorano, quien continua con dolor, fiebre, y con la presión alta.