Mari Carmen Rosas/Minatitlán
Se trata de dos familias del sur de Veracruz que solicitarán a los magistrados que se revisen los casos de feminicidio, sentenciados por Florencio Hernández, juez de Coatza que fue vinculado por cohecho, que refiere a actos de corrupción en su cargo.
El primer caso es sobre Andrea Jara, de 29 años, sentenciada el pasado septiembre del 2022 por ser copartícipe en el feminicidio de Silvia Jazmin Armendáriz Alpuche ocurrido el 14 de Agosto del 2019.
Armenta Alpuche, fue localizada en un basurero clandestino en Cosoleacaque y presentaba un balazo en la cabeza y estaba calcinada de la cabeza a las rodillas.
La apelación con los magistrados estatales de la sentencia de Andrea fue en contra y la última oportunidad para demostrar inocencia es un amparo federal y la revisión de esta resolución.
Andrea fue sentenciada a la pena máxima de 70 años de prisión por el juez Florencio Hernández Espinoza, Lorena Jara señala que las pruebas presentadas fueron falsas.
“Finalmente la sentencian con una geolocalización de su celular, que no es su número de celular, ni es su IMEI, el juez de manera arbitraria no permitió que nosotros presentáramos un peritaje de la ubicación del celular de Andrea”, señala Lorena Jara, madre de la sentenciada.
“Así como también la sentencian con la declaración de una mujer que viene del estado de Nuevo León. En ningún momento identifica, ni describe a Andrea, ella dice simplemente que vio a un hombre y a una mujer metiendo el cuerpo de otra persona a la cajuela de un carro, pero no los puede identificar porque no los vio bien”, agrega.
Otro caso es el feminicidio de Brenda Flores Flores asesinada en la comunidad de Minatitlán Agrícola ganadera Francisco Villa cerca del Cerro de Nanchital en el 2016, la mujer localizada flotando sin vida en un lago presentaba golpes en el cuerpo.
Por este caso el juez Florencio Hernández Espinoza sentenció a William Flores Sánchez, pareja de Brenda, a 70 años de prisión el pasado febrero.
La familia de William señala que en el 2016 William fue detenido y luego puesto en libertad por el juez Jorge Yunis Manzanares ya que no había pruebas, pero que en el 04 de marzo del 2002 fue detenido en Cancún por el mismo delito y meses después sentenciado por Hernández Espinoza.
“Le pido a las autoridades que revisen ese caso, porque es injusto lo que están haciendo”, señala la madre del sentenciado.
“Desgraciadamente en esa sentencia hay muchas anomalías, el juez Florencio lo sentencia a 70 años sin checar el expediente, esperemos esto se haga viral y llegue al presidente Andrés Manuel López Obrador”, Manuel Mateo.
En el caso de William aún se espera la respuesta de la apelación a los magistrados estatales, de tener una respuesta negativa, lo siguiente es un amparo federal y la revisión de este, últimas oportunidades para demostrar la inocencia.
Mientras tanto Florencio Hernández Espinosa fue vinculado a proceso y se encuentra en la cárcel. Los sentenciados esperan resoluciones de los magistrados, y los familiares de las víctimas confían en que la justicia sea transparente y los culpables castigados, pues para la fiscalía los mencionados son los responsables de estos feminicidios.