_Autoridades estatales y federales lograron un acuerdo con los manifestantes durante el mediodía de este miércoles y las válvulas fueron reabiertas_
Fluvio Cesar Martínez.
Coatzacoalcos, Ver. – A 24 horas de que ejidatarios de Tatahuicapan tomaron las instalaciones de la presa “Yuribia”, que abastece de agua potable a más de 300 mil familias del sur de Veracruz, autoridades lograron un acuerdo con los inconformes que exigían la realización de obras en la localidad serrana, por lo que este mediodía, decidieron liberar el acueducto y se reabrieron las válvulas.
A pesar de que no se reportaron graves afectaciones en los municipios de Coatzacoalcos, Minatitlán y Cosoleacaque que, dependen de esta presa, la directora de la Comisión del Agua y Saneamiento Hildeliza Díaz Calafell, señaló que en los sectores donde se reporto baja presión, el servicio se normalizará en el transcurso de la tarde.
“Nosotros desde temprano estamos atendiendo escuelas y hospitales que siempre son la prioridad y las pipas van a estar a disposición las próximas 48 horas, en algunas zonas de la ciudad es casi inmediato no pasa más de media hora o cuarenta minutos y l gente comienza a recibir el servicio de agua”, puntualizó la funcionaria.
Coatzacoalcos es el municipio donde hay más familias que dependen del Yuribia, hablamos de 140 mil usuarios de acuerdo a información de la CMAS. Donde seguirá enviando pipas de agua en las colonias con más solicitudes.
El personal que opera el sistema de envío ya ingresó a las plantas y comenzaron la revisión de todas las áreas para supervisar que no se haya afectado el funcionamiento.
Hasta el momento no se han dado a conocer los detalles de los acuerdos a los que llegaron los representantes del gobierno del estado y los pobladores de la zona serrana, que exigían la pavimentación de los caminos rurales que conectan con 23 comunidades de Tatahuicapan, además del mejoramiento del servicio en el hospital de aquella localidad.
En tanto, el organismo operador continua exhortan a la población del sur de Veracruz, a hacer uso racionado del líquido, además de reportar si existe escasez en sus domicilios.
A pesar de que en los últimos años se han realizado varias tomas a la presa, las autoridades federales ni estatales, han puesto un alto para evitar que dichas prácticas continúen.